Año: 2012
Tapa: Rústica
Edición: 1º
Páginas: 340
Autor/es: Basílico, Ricardo Á. Co-Autor/es: Todarello, Guillermo A.
Prólogo: I. Cuando se me propuso prologar esta obra sentí, por un lado, una enorme gratitud por el respeto académico que siento por los autores. Por otro, la propuesta implica una gran responsabilidad, puesto que se me confió la tarea de presentarle a la comunidad científica el fruto de su trabajo. Permítaseme mencionar mi conocimiento del Dr. Ricardo Ángel Basílico, desde la época de su prolífica actividad académica como Catedrático en la Universidad Nacional de la Patagonia, donde realizaba incontables actividades vinculadas al saber penal. Siempre he valorado especialmente su capacidad para ofrecer a su comunidad, donde desempeñaba además el ejercicio de la magistratura, el más alto nivel académico enfrentando las dificultades propias de la distancia, por lo que muchas veces todo —desde lo nimio hasta lo importante— resulta más arduo. Valga lo dicho como una necesaria introducción, con las disculpas del caso, ya que intentaré transmitir al lector, al menos a modo de adelanto, aquello que me ha generado el leer la obra por primera vez. Para ello, habré de objetivar mis comentarios en todo cuanto me fuera posible, al abordar las cuestiones jurídicas. II. Siempre es motivo de satisfacción la presentación de una nueva obra jurídica. Implica acercar al mundo del derecho, nuevas ideas sobre uno o varios temas. Pero también un libro acerca a los lectores a la reflexión razonada de los temas que se plantean. Por supuesto, también a la disidencia conceptual, al espíritu crítico y al crecimiento del derecho como ciencia. Pero más allá de los sobrados méritos propios de la obra, no se puede pasar por alto que la publicación de un libro sobre temas de la parte especial, es motivo de particular reconocimiento. Es que la propia dogmática penal necesita de investigaciones serias como la presente acerca de los delitos en particular, ya que, a diferencia de lo que ocurre en la actualidad con los trabajos de la parte general, no se registran avances significativos en la interpretación doctrinaria de los tipos penales. El tema elegido, confieso, me motivó positivamente desde un primer momento, porque el delito de Abandono de Personas es —a mi juicio— una de las figuras más complejas que presenta la parte especial y porque su estudio nos lleva —una y otra vez—, necesariamente, al examen de cuestiones jurídicas directamente vinculadas a la parte general. Los autores, conocedores de esta problemática, no han ahorrado esfuerzos en su investigación y abordaje. Ello se verifica en el tratamiento dado al concepto y contenido del bien jurídico protegido, en el análisis efectuado con relación a la estructura de los delitos de omisión propia e impropia y, vinculado a este tópico, al desarrollo de la teoría tradicional —y su evolución dogmática— de la posición de garante. Este análisis efectuado por los autores resulta impecable y demuestra un conocimiento profundo del marco conceptual de la teoría del delito y de su constante evolución. Además, se aprecia un manejo certero de los conceptos, sin que para ello se pierdan en consideraciones que serían propias de una obra orientada específicamente a la parte general. En el primer capítulo de la obra, se hace un repaso de las características particulares que asume el bien jurídico protegido en cada uno de los seis capítulos que integran el Título I, “Delitos contra las personas”, del Libro II del Código Penal. Esa tarea, como explican, integra el primer paso para fundamentar las razones por las cuales han decidido realizar un estudio pormenorizado de las conductas que integran el Capítulo VI, habida cuenta de que los delitos de abandono de personas y omisión de auxilio presentan elementos que los obliga a abordarlos desde un plano distinto y particular. Ello empieza a notarse a partir del segundo capítulo, momento en el cual se ingresa en el análisis detallado del art. 106 del Cód. Penal y donde nace el desarrollo de aquellos temas que me motivaron al conocer el título de la obra, tales como el desarrollo teórico que se hace en relación a las diferentes posturas acerca de la problemática vinculada al concepto y contenido del bien jurídico y aquellas relacionadas con los delitos de omisión impropia. Lo propio ocurre en el capítulo destinado a la omisión de auxilio. Además de las referencias que, en general, se hacen con relación a la legislación comparada, la obra cuenta con un agregado de importancia, ya que los capítulos III y V están dirigidos, en particular, al estudio del tratamiento que estas conductas reciben en el derecho español. El análisis del abandono de menores e incapaces y la omisión del deber de socorro en esa legislación permite globalizar el conocimiento. Finalmente, los autores analizan la posible vinculación que puede generarse entre el homicidio o lesiones por omisión y el delito de abandono de persona cuando resultare la muerte o grave daño en el cuerpo o en la salud de la víctima y, para ello, previamente se aborda la problemática sobre la posibilidad de atribuir un resultado previsto en un tipo penal de modo activo a un comportamiento omisivo que incluye el análisis de un caso de absoluta actualidad, como son los hechos acaecidos en el local “República Cromañón”. III. Se destaca también en el texto el empleo de un lenguaje claro, preciso y absolutamente comprensible, dotado con el aporte de gran cantidad de doctrina jurídica, lo que dará a la labor efectuada por sus autores un valor que debe resaltarse. Es que utilizar el lenguaje cotidiano en clave de derecho penal acarrea la obligación absoluta de ser taxativo, ya que sus términos conllevan naturalmente toda suerte de juicios interpretativos, cargados de evidente subjetividad, con el conocido riesgo de vulnerar el principio de legalidad penal. A ello se agregan los prejuicios subyacentes en el conocimiento lingüístico de la sociedad, razón por la cual se debe un mayor cuidado en la descripción de los conceptos que se analizan, lo que los autores superan con admirable destreza. En consecuencia, destaco de este libro —entre otras cosas— el logro de una perfecta convergencia entre la especificidad de la materia penal y la nitidez en su transmisión. De modo tal que cualquier persona que se que se acerque al texto saldrá enriquecida con su lectura ampliando el abanico de lectores a estudiantes, incluso a los noveles. IV. En conclusión, esta obra jurídica ha sido realizada con un claro sentido crítico y analítico, producto del conocimiento y la experiencia de los autores. Han demostrado su indudable capacidad para abarcar temas indudablemente difíciles, haciéndolos ver con la claridad propia de las cosas simples. Este trabajo, de la misma manera, entusiasma a quien se acerque a él. Los posibles lectores, sean estudiantes universitarios, profesionales en ejercicio de la abogacía o profesores de Derecho, verán ampliamente satisfechas sus expectativas al leerlo. Sin dudas, corresponde augurarle a este libro, ahora en manos de los lectores, un futuro promisorio. En síntesis, bienvenida la obra y bienvenidos todos aquellos que se interesen en su lectura porque superará cualquier expectativa que sobre ella tuviesen. Felicito a los autores y encargo la obra a los lectores, a quienes ya les pertenece. Descripción: Delitos contra las personas. Características particulares del bien jurídico protegido en cada una de las figuras. El delito de abandono de personas. Abandono de menores e incapaces en el derecho español. El delito de omisión de auxilio. La omisión de socorro en el derecho español. El delito de abandono de personas: su relación con las figuras de homicidio y lesiones por omisión. Abandono de personas. Jurisprudencia destacada.